Hoy empezaré hablando de mi
última lectura, la saga Africanus de Santiago Posteguillo, en la que se narra
la vida de Publio Cornelio Escipión. La verdad es que me da una gran alegría el
poder decir que se me llena la boca solamente de buenas palabras. La saga se
compone de tres volúmenes: Africanus, el
hijo del cónsul, Las legiones
malditas y La traición de Roma.
El primer volumen abarca la infancia de Escipión y la invasión de la península itálica por el ejército cartaginés dirigido por Aníbal. Además nos acerca a la vida de otros personajes contemporáneos a Escipión, como el escritor Plauto. En el segundo tomo, se narran los acontecimientos durante la expulsión de los cartagineses de Hispania y la llegada del ejército romano a Cartago. En el tercer y último volumen se narra la vorágine de la guerra de Asia y el final de los grandes generales de esta historia: Escipión y Aníbal.
El primer volumen abarca la infancia de Escipión y la invasión de la península itálica por el ejército cartaginés dirigido por Aníbal. Además nos acerca a la vida de otros personajes contemporáneos a Escipión, como el escritor Plauto. En el segundo tomo, se narran los acontecimientos durante la expulsión de los cartagineses de Hispania y la llegada del ejército romano a Cartago. En el tercer y último volumen se narra la vorágine de la guerra de Asia y el final de los grandes generales de esta historia: Escipión y Aníbal.
La narración es brillante: amena,
ligera y cautivadora. Para aquellos que amen la narrativa histórica, desde
luego es una obra que no pueden dejar de leer. Pero para aquellos que no la
aprecien especialmente, se sentirán totalmente prendidos de esta obra.
Continuamente se puede apreciar
el inmenso trabajo de investigación que respalda a cada capítulo, llenos de información,
resultado de un enorme trabajo de documentación y de una forma de narración que
engancha desde el principio. He de reconocer que mi mayor temor antes de
comenzar a leerlos fue que, a modo de Tolkien, Posteguillo pecara de
descripciones densas de las batallas relatadas. Pero para aquellos que sufran
del mismo recelo, no hay motivo para esa inquietud: no se les da mayor peso en
el libro que a otros sucesos, igual de relevantes, que acontecen en la
historia.
Otro aspecto que me parece
interesante resaltar es la capacidad que tiene Posteguillo para hacer
evolucionar a sus personajes. Cuando terminé de leerlos me di cuenta que
aquellos individuos de los últimos capítulos no eran, ni de lejos, los mismos
de los primeros, y que ese cambio era la consecuencia de la acción de la propia
vida. Algo, en mi opinión, difícil de plasmar para un escritor, pero que
Posteguillo logra sin problemas.
Los tres tomos vienen acompañados
con un glosario, la mayoría traducciones de términos latinos, un árbol
genealógico de la familia Escipión, el listado de los cónsules de Roma durante
los años en los que transcurre la acción, esquemas de las batallas y asedios
descritos en los libros, y mapas políticos del periodo en el que transcurren
las novelas.
Por último, si tenéis ocasión, os aconsejo que escuchéis alguna entrevista al autor: resulta muy interesante escuchar a una persona que desprende cultura en cada palabra. Para septiembre de este año se espera también un pequeño libro relacionado con su ámbito docente, formado por relatos sobre algunos momentos singulares de la literatura universal.
Por mi parte, estoy deseando ya
leer la primera novela de su nueva trilogía sobre Trajano: Los asesinos del emperador, que ya va por su 6ª edición en Planeta
y 4ª en El Círculo de Lectores.
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